Perlas del Mar de Cortez – ESPAÑOL

Aquí conocerá la mayor parte de las actividades involucradas en el cultivo de perlas, así que póngase unas cómodas sandalias playeras, sus lentes de sol favoritos y prepárese a quedar inmerso en el mundo de Perlas del Mar de Cortez: la primer y única Granja Comercial de Perlas de Cultivo en México y el Continente Americano.

La Granja

La granja de “Perlas del Mar de Cortez” actualmente le pertenece y es operada por inversionistas mexicanos, incluyendo a los tres investigadores principales del proyecto de investigación “Perlas de Guaymas”. Las instalaciones de la granja aún se encuentran dentro del Campus Guaymas del Tec de Monterrey/Milenio.
La granja se encuentra situado sobre una de las bahías más hermosas de la región de Guaymas: Bacochibampo (que significa “Bahía de las Víboras” en lengua Yaqui), y tuvo sus inicios en el año 1991, como una extensión del proyecto de “Cultivo de Moluscos Nativos”. Eventualmente fue incrementando tanto su importancia para este Campus como su tamaño.
En 1996, finalmente se le declaró como proyecto prioritario bajo el nombre de “ITESM/Perlas de Guaymas”, hasta que llegó el momento de establecer una empresa comercial conocida como “Perlas del Mar de Cortés S.A. de C.V.” que posteriormente fue adquirida por “Granja de Perlas del Mar de Cortez S.A. de C.V.”. En la actualidad recibimos a miles de turistas (tanto nacionales como extranjeros), y somos considerados como una excelente opción para el visitante regional.

El Muelle

Se encuentra Ud. en el muelle, dando el primer paso al fascinante mundo de la perlicultura. Desde aquí podrá observar la incesante actividad de la granja. Frente al muelle se localiza la granja de cultivo en suspensión, de donde se “cuelgan” las jaulas de cultivo en la que se encuentran las ostras.
Tenemos poco más de 250,000 ostras perleras en cultivo dentro las ricas y nutritivas aguas de la Bahía de Bacochibampo (“Bahía de las Víboras” en la lengua Yaqui). Esta es -sin lugar a dudas- la mayor concentración de ostras perleras en todo el Pacífico americano. Una granja de perlas no sólo tiene un motivo comercial, sino también tiene un trasfondo conservacionista: esta gran concentración de ostras actúa como un enorme propágulo de ostras perleras, de forma que los bancos naturales puedan recuperarse.
Empleamos dos especies de Ostras nativas (que otrora fueron abundantes en las aguas del Golfo de California): la “Concha Nácar” (Pteria sterna) y la “Madreperla” (Pinctada mazatlanica). De estas, el 99% está conformado por la “concha nácar” y el restante por la “madreperla”.
Ambas especies pertenecen a la familia de las Ostras Perleras (Pteriidae), y no tienen relación directa con los Ostiones (aparte del hecho de que también son moluscos bivalvos). De hecho, las ostras perleras están más emparentadas con las “escalopas” (los “Pectínidos”, también conocidos como “vieiras” o “zamburiñas”) que con los mejillones y ostiones.

Las Ostras Perleras del Mar de Cortez

Como ya lo habíamos mencionado anteriormente, existen dos especies de ostras perleras nativas en el Golfo de California o Mar de Cortéz: la “Madreperla” (Pinctada mazatlanica) que puede alcanzar un tamaño de hasta 18 cm (promedio de 12 a 16 cm), y la “Concha Nácar” (Pteria sterna) que llega a alcanzar una talla máxima de hasta 16 cm (promedio de 8 a 11 cm).

De entre estas dos especies, la “Concha Nácar” es capaz de producir perlas de colores inusuales: negro, arco iris, azules, verdes y púrpuras. También obtenemos perlas en colores grises, tanto en claro como en oscuro, pero siempre con la presencia de sobretonos verdes, azules y lavanda, así como otros colores como el bronce y el dorado.
Estas perlas bien pueden ser consideradas como las más excepcionales en el mundo, ya que sólo se cultivan en esta granja, y la producción es baja si se compara con la de cualquier otro tipo de perla de cultivo en el planeta.

La Colecta de Semilla ú Ostrilla

Antes de comenzar a cultivar perlas, se procede al cultivo mismo de las ostras perleras. Este proceso da inicio con una operación conocida bajo el nombre de “colecta de semilla”.

En ciertas épocas del año, cientos de bolsas colectoras son introducidas en las aguas de la bahía. Allí se mantienen por espacio de 2 a 3 meses, pasivamente colectando a las pequeñas ostrillas. Esto sucede gracias a que nos sincronizamos con la temporada reproductiva de las ostras perleras.
Durante el pico reproductivo, las ostras adultas desovan en las aguas y sus gametos se fertilizan, así forman miles de millones de pequeñísimas larvas natatorias. Pasado uno o dos meses, las larvas maduran y forman una pequeña concha, y comienzan la búsqueda de un hogar: las bolsas colectoras.

Las bolsas colectoras están hechas de malla plástica rellenas con deshechos de redes de pesca (para darles volumen). Nuestros colectores son muy atractivos para las pequeñas ostras, ya que aquí en el Golfo de California las ostras suelen adherirse a ciertas especies de corales (familia Gorgonidae). La estructura de la bolsa y la del coral es muy similar, por lo que podemos engañar a las ostrillas, haciéndolas creer que se están adhiriendo a un “gigantesco arrecife coralino”. Nuestra técnica es tan efectiva que hemos llegado a capturar más de 8,000 ostrillas por bolsa colectora.

Sin embargo, esto aún no ha finalizado. Debemos permitirle a las pequeñas ostrillas el tiempo necesario para que crezcan a un tamaño visible a simple vista (de unos 3 mm). Pasado este tiempo, las bolsas colectoras se regresan al muelle y se comienza la pizca manual. Al finalizar el día, las pequeñas ostras recolectadas se introducen dentro de su primera jaula de cultivo. Finalmente da inicio la actividad de Cultivo…

El Cultivo de las Ostras

La primera vez en que una ostra conoce la protección de una jaula de cultivo es dentro de una “Red Perlera”. Estas jaulas consisten en pequeñas pirámides de alambre y malla fina. Esta malla cumple varios propósitos: evitar que las ostrillas escapen, permitir un buen flujo de agua y evitar la entrada de peces predadores.

De hecho, es importante recalcar aquí, que dentro de la Naturaleza, tan sólo 1 a 10 ostras perleras llegan a alcanzar la madurez. Pero en una granja de perlas, aproximadamente el 80% sobrevive hasta alcanzar la madurez sexual, y de hecho llegan a reproducirse varias veces durante su vida de 4 años en la granja.

Protegidas de esta forma, las pequeñas ostras comenzarán a crecer rápidamente, alimentándose de las nutritivas aguas de la bahía. Pasados 4 a 10 meses, las ostras alcanzarán el tamaño de “juveniles” (4 cm) y se les transferirá al siguiente tipo de jaula de cultivo: la “Red Linterna”.
Este tipo de red es de forma cilíndrica, con cinco pisos o niveles, y tienen una malla más amplia. Esto se debe no sólo al hecho de que las ostras han crecido y ya no se pueden salir, sino que es para eficientizar el flujo de agua. Esto es importante, que las ostras perleras son organismos filtradores, de forma que obtienen su alimento de las aguas marinas. Una malla amplia favorece una mejor circulación de agua, así que las ostras crecen más rápido.

Los juveniles se mantienen dentro de dichas jaulas por un tiempo variable de 4 a 10 meses, hasta que son adultos jóvenes y alcanzan a medir 8 a 10 cm, alcanzando la talla mínima para comenzar a producir una perla cultivada. Es ahora cuando da inicio la operación de Perlicultura.

Les invito a ver este video del proceso de Cultivo de Perlas en el Golfo de California, México:

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